**Lucha contra la naturaleza
Irma Ramírez Molina/
De septiembre a diciembre, quedaron marcados por los desastres ocasionados en miles de familias, producto de fenómenos naturales, en 50 años, 1944 la inundación en Chiapa de Corzo donde un Alemán de apellido Beutelespacher, único con lancha logró salvar la vida de muchos en ese entonces, los sismos del 5 de octubre de 1975; Chiapa de Corzo, el pueblo que poco más de la mitad fue sepultado entre los escombros.
El caso Stan que también fue otro momento y que sin duda marcó a miles de sobrevivientes, cuerpos que quedaron sepultados bajo toneladas de lodo, casas que aún pueden verse como viejo testimonio de la desgracia en Valdivia uno de los más perjudicados en su momento.
1995, otro movimiento telúrico que despertó al pueblo, ciento de viviendas en Villaflores lugar del epicentro, terminó por opacar la vida de niños incluso, 2015 un nuevo sismo antes de las dos de la tarde, la Costa el lugar de origen, otro fenómeno que pone en tensión a los chiapanecos.
Llega el 2017 y éste, catalogado como el más grave, hace olvidar momentáneamente los pasados; sin embargo este sismo nos recuerda los pasados, los fenómenos naturales que se han dado en Chiapas, no solo en movimientos de tierra, sino también la presencia de huracanes, tormentas tropicales y porque no decirlo, la erupción de volcanes, el último el caso del Chichonal.
Hasta donde hay que comprender, que no se puede con la naturaleza, que somos individuos inferiores ante la furia del planeta, en otras palabras, que no somos más que sentimientos al momento de la presencia de alguno de estos.
Debería de servir para reflexionar en torno a la situación que se está viviendo realmente, es decir no solo el pensar que se tiene que trabajar en la resistencia, en como evacuar, poner alarmas y un sinfín de cosas, sino qué estamos haciendo realmente para una mejora en general.
Definitivamente es falso pensar que tenemos que convivir con los fenómenos, ni tampoco acostumbrarnos; lo que hay que hacer es saber vivir, saber ubicarnos en lugares menos peligrosos, sostener la movilidad y la defensa de la vida.
Por ello el llamado a todos, políticos y ciudadanos; a educarnos a sentir el amor por la vida, no más invasiones, no más muertes a ríos, no más tala, no más saqueo ni permitir la apertura de minas, no cabemos nuestras propias tumbas y de paso la de los demás.
Sintamos el dolor de los niños, de los ancianos, de las personas con discapacidad, esto es lo que tiene que movernos ahora, para entender que no se puede ni se debe de accionar en contra de la vida, este es momento de ver que nadie tiene comprada la existencia, igual afecta a ricos y pobres, hagamos conciencia y solo así entonces, Chiapas será otro.
BASE DE DASTOS…-
La renuncia tan anunciada ya de José Antonio Aguilar Bodegas, a la secretaría del Campo, pone en tensión a todos, pues no se puede negar que Josean es una pieza importante dentro del PRI, con capacidad, experiencia para poder desempeñar un buen papel y ha dicho que buscará la candidatura.
El PRI tiene ahora a dos aspirantes, a José Antonio Aguilar y a Roberto Albores; pero logrará vencer quien más fuerza puede tener para sostener un tricolor resquebrajado totalmente, lleno de llagas, de parches, de inconformes, donde incluso muchos siendo del Tri, se pintan de verde, otros más ven hacia otros rumbos.
El PRI, tiene el sartén por el mango, cuando ellos saquen a un candidato, entonces se conocerá quien será el otro de la Alianza, no hay que buscarle más, las cosas están dadas para unos, pero todo dependerá de los tiempos.***
Irma Ramírez Molina/
De septiembre a diciembre, quedaron marcados por los desastres ocasionados en miles de familias, producto de fenómenos naturales, en 50 años, 1944 la inundación en Chiapa de Corzo donde un Alemán de apellido Beutelespacher, único con lancha logró salvar la vida de muchos en ese entonces, los sismos del 5 de octubre de 1975; Chiapa de Corzo, el pueblo que poco más de la mitad fue sepultado entre los escombros.
El caso Stan que también fue otro momento y que sin duda marcó a miles de sobrevivientes, cuerpos que quedaron sepultados bajo toneladas de lodo, casas que aún pueden verse como viejo testimonio de la desgracia en Valdivia uno de los más perjudicados en su momento.
1995, otro movimiento telúrico que despertó al pueblo, ciento de viviendas en Villaflores lugar del epicentro, terminó por opacar la vida de niños incluso, 2015 un nuevo sismo antes de las dos de la tarde, la Costa el lugar de origen, otro fenómeno que pone en tensión a los chiapanecos.
Llega el 2017 y éste, catalogado como el más grave, hace olvidar momentáneamente los pasados; sin embargo este sismo nos recuerda los pasados, los fenómenos naturales que se han dado en Chiapas, no solo en movimientos de tierra, sino también la presencia de huracanes, tormentas tropicales y porque no decirlo, la erupción de volcanes, el último el caso del Chichonal.
Hasta donde hay que comprender, que no se puede con la naturaleza, que somos individuos inferiores ante la furia del planeta, en otras palabras, que no somos más que sentimientos al momento de la presencia de alguno de estos.
Debería de servir para reflexionar en torno a la situación que se está viviendo realmente, es decir no solo el pensar que se tiene que trabajar en la resistencia, en como evacuar, poner alarmas y un sinfín de cosas, sino qué estamos haciendo realmente para una mejora en general.
Definitivamente es falso pensar que tenemos que convivir con los fenómenos, ni tampoco acostumbrarnos; lo que hay que hacer es saber vivir, saber ubicarnos en lugares menos peligrosos, sostener la movilidad y la defensa de la vida.
Por ello el llamado a todos, políticos y ciudadanos; a educarnos a sentir el amor por la vida, no más invasiones, no más muertes a ríos, no más tala, no más saqueo ni permitir la apertura de minas, no cabemos nuestras propias tumbas y de paso la de los demás.
Sintamos el dolor de los niños, de los ancianos, de las personas con discapacidad, esto es lo que tiene que movernos ahora, para entender que no se puede ni se debe de accionar en contra de la vida, este es momento de ver que nadie tiene comprada la existencia, igual afecta a ricos y pobres, hagamos conciencia y solo así entonces, Chiapas será otro.
BASE DE DASTOS…-
La renuncia tan anunciada ya de José Antonio Aguilar Bodegas, a la secretaría del Campo, pone en tensión a todos, pues no se puede negar que Josean es una pieza importante dentro del PRI, con capacidad, experiencia para poder desempeñar un buen papel y ha dicho que buscará la candidatura.
El PRI tiene ahora a dos aspirantes, a José Antonio Aguilar y a Roberto Albores; pero logrará vencer quien más fuerza puede tener para sostener un tricolor resquebrajado totalmente, lleno de llagas, de parches, de inconformes, donde incluso muchos siendo del Tri, se pintan de verde, otros más ven hacia otros rumbos.
El PRI, tiene el sartén por el mango, cuando ellos saquen a un candidato, entonces se conocerá quien será el otro de la Alianza, no hay que buscarle más, las cosas están dadas para unos, pero todo dependerá de los tiempos.***
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