INFODEMIA PRESIDENCIAL 160520

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Irma Ramírez Molina/

Todo lo relacionado a la pandemia del Covid 19, está copado por el espectro mediático y palabras claves como #Coronavirus, #Vacuna, #Pandemia, #Virus, #Covid reportan usos estratosféricos en los motores de búsqueda a nivel mundial.
A vista de medios internacionales, de España, Inglaterra y Estados Unidos, en México hay un “exceso optimismo” de parte del presidente Andrés Manuel López Obrador, un uso discrecional del número de contagios, secretismo en los fallecimientos y una urgencia por reabrir actividades que podría disparar las alertas que lleven a sobrepasar la capacidad instalada en hospitales, si le calculan mal.
Y ante ese escenario promovido por “conservadores”, por la “derecha”, por la “mafia del poder” recargada, AMLO responde con una conferencia mañanera de dos horas y media diaria que ocupa el espacio mediático al principio del día, establece la agenda de ataques y defensa y gobierna desde las “benditas” redes sociales.
Eso, habida cuenta que fustiga a quienes se le oponen, corrige a su propio gabinete y acorrala a sus adversarios (Felipe Calderón es el ejemplo más claro y reciente), ahora le permite mostrar sus "cartas fuertes" para las elecciones del próximo año y con ello, tener el resto del día libre de los inconvenientes de informar bajo condiciones que no sean las propias o impuestas por sus adversarios.
Y entonces, con la alquimia en mano que le permite prescindir de los medios tradicionales, AMLO abrió un frente de comunicación para la línea de batalla de la pandemia mundial: un elocuente doctor, epidemiólogo, asertivo, que comunica en los términos alienados que se necesitan y, a partir de ahí, toda una estrategia que tiene “azorrillada” a la oposición, enojados a los medios que perdieron el subsidio gubernamental de la publicidad y convertida en una "fiesta de locos" las redes sociales entre chairos y fifís, amlovers y pejezombis, en el maniqueo y conveniente escenario de "conmigo o contra mí".
Ahora, vemos una quinta conferencia de prensa diaria (Mañanera, Salud Chiapas, Bienestar, Créditos y Covid 19) que ocupan 6 horas de transmisiones en vivo, de un supuesto ejercicio de transparencia, rendición de cuentas y contacto directo al ciudadano, información en exceso que más bien son informes diarios de lo que consideran han hecho bien en año y medio de gobierno federal. Con alcances superiores a los 60 millones de personas conectadas cada mes.
Claro que la peor parte de todo este show, tiene que ver con la nula o poca credibilidad de los representantes de los medios de comunicación que son los mismos de siempre que, aunque pareciera que le preguntan con "rudeza", no hacen más que congraciarse con el poder, redondearle la conocida respuesta, aplaudirles en primera línea y contrarrestar el efecto negativo del periodismo que lo ataca, que lo analiza, que lo critica.
Si Vicente Fox hubiera tenido ese "alcance" de generar su propia corriente de opinión, su propia opinión pública edificada con todos y cada uno de sus seguidores, aquel proceso democrático mexicano de "cambio", otra cosa hubiera sido, no hubiera resultado el fiasco que terminó siendo, porque ya en el poder, imperó la falta de escrúpulos y de idea de gobierno.
Andrés Manuel López Obrador tiene 18 años configurando su estrategia política, ya la había implementado cuando fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México y casi lo puso en Los Pinos allá en 2006, cuando perdió por segunda ocasión la Presidencia.
Hoy está en el poder, no le importa contaminar a todos los mexicanos de su propia Infodemia presidencial, de llenarlos de datos, de frases, de dichos, de recuerdos nostálgicos de su pasado glorioso en la oposición, de imponerse a costa de lo que sea, incluso no de mentir, pero sí de no informar honestamente.
Hoy es el presidente de México y no tiene ningún interés en soltar el hilo conductor de su propia narrativa, de llevar de inicio a fin, la construcción de su propia historia, su hito, su paso histórico como “el mejor presidente de México”, su aspiración personal que tiene a todo un país encontrándolo "hasta en la sopa".
Nada más y nada menos.

NOTA: La Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva tiempo usando la palabra "Infodemia" para referirse a la sobreabundancia informativa falsa y a su rápida propagación entre las personas y medios.